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Los gases de efecto invernadero absorben la energía solar y mantienen el calor cerca de la superficie de la Tierra en lugar de dejarlo escapar al espacio. Esta captura de calor se conoce como efecto invernadero.
¿Por qué debemos preocuparnos por esto? Las concentraciones de gases de efecto invernadero están afectando actualmente el tiempo y los sistemas climáticos de nuestro planeta provocando el conocido “Cambio Climático”. Esto abarca no sólo el aumento de las temperaturas medias conocido como calentamiento global, sino también fenómenos meteorológicos extremos, cambios en las poblaciones y hábitats de la vida silvestre, el aumento del nivel del mar y muchos otros efectos.
Para comprender la gravedad del asunto: al mundo sólo le queda una quinta parte de su “presupuesto de carbono” (el total es de 2,8 billones de toneladas métricas) para evitar que la Tierra se caliente más de 1,5 grados centígrados.
Todos los sectores de la economía global, desde la manufactura hasta la agricultura, pasando por el transporte y la producción de energía, contribuyen con gases de efecto invernadero a la atmósfera.
La buena noticia es que las tecnologías para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero ya existen: reemplazar los combustibles fósiles por fuentes renovables, aumentar la eficiencia energética y desalentar las emisiones de carbono poniéndoles un precio.
Los incentivos adecuados podrían impulsar al mundo a lograr hasta un tercio de las reducciones de carbono necesarias para 2030. Las vías para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 o 2 grados Celsius, como apunta el IPCC (Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático), dependen en parte de la adopción de métodos para extraer CO2 de la atmósfera. Estos métodos incluyen la plantación de árboles, la conservación de bosques y pastizales existentes y la captura de CO2 de plantas de energía y fábricas.
Pero primero, no podemos actuar sobre lo que no sabemos. Para poner todo esto en marcha, necesitamos tecnologías que midan la cantidad de gases que estamos produciendo. Sólo así se podrán tomar acciones específicas para empezar a solucionar este problema.
En Peterson Technologies siempre tenemos la solución a mano, en este caso nuestra GHG Platform.
Desarrollada por nuestros equipos de tecnología y expertos en GEI, nuestra plataforma permite a las empresas gestionar con precisión su huella de carbono. Utilizando un algoritmo personalizado, rastrea y gestiona las emisiones de carbono, proporciona datos actualizados en un entorno dinámico y puede adaptarse a las necesidades específicas de cada cliente en una semana.
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